El minotauro nos viene de la mitología griega, que nos cuenta que Pasífae, hija de Helios y la ninfa Creta, se enamoró de un toro blanco y se las ingenió para sostener relaciones sexuales con él. De ahí nació el minotauro, una criatura terrible mitad humana, mitad toro, con una bestialidad digna de temer.