Aunque no todos quedaron conformes con la manera como presentaron el personaje del Mandarín, no cabe duda que la película estuvo muy bien hecha. Además, quién no adoró la escena donde Tony hacía una fiesta de luces en el aire cuando se presentaron todas las armaduras que había creado para ayudarle a rescatar a Peper. La cinta alcanzó un éxito que solo era comparable con el de Avengers en ese momento a pesar de tratarse de una película donde veríamos a un personaje en solitario.