En 1817 un zapatero encontró a una joven desorientada que hablaba un lenguaje muy extraño, nadie podía entenderla. Buscaron personas que conocían diversos idiomas y nadie podía comprender lo que decía la joven. Más tarde un supuesto navegante apareció siendo capaz de traducir lo que ella decía. Decía ser la princesa Caraboo de la isla Javasu en el Océano Indico. Afirmó haber sido secuestrada por piratas, pero que había logrado escapar y saltado al agua, nadando hasta la orilla de Bristol. La joven a partir de ese momento vivió dignamente y era la favorita de los habitantes locales. Más tarde se supo la verdad, se trataba de la hija de un zapatero, Mary Baker, fue criada en distintos lugares y había inventado un idioma creando este personaje ficticio.