Es un mecanismo de estafa piramidal orientado hacia mujeres, muy popular en América Latina. El esquema promete multiplicar por ocho no solo la inversión, sino también las energías positivas. Acompañan los "negocios" con mensajes de espiritualidad y empoderamiento femenino. Se trata de un esquema de cuatro niveles en el que se van convocando personas para que depositen dinero al administrador del sistema.