Johannes Stöffler, un respetado matemático y astrólogo alemán, predijo que una gran inundación cubriría el mundo el 25 de febrero de 1524, cuando todos los planetas conocidos estuvieran alineados bajo Piscis, un signo de agua. Cientos de panfletos anunciando la inundación venidera fueron emitidos y pusieron en marcha un pánico general. El resultado, apenas un chubasco pero nada que pudiera ahogar a nadie.