Las cifras oficiales de organismos internacionales señalan que en los últimos 15 años se han cometido 200 000 homicidios en Venezuela. La inestabilidad política, el clima de tensión por una posible guerra civil o intervención militar, el hambre, la falla persistente de los servicios básicos, y más, convierten a Venezuela en uno de los países más peligrosos del mundo en el presente.