Fue la primera mujer en volar sola a través del Atlántico en 1928, pero mientras intentaba establecer un nuevo récord, desapareció en 1937. Se cree que el avión quedó sin combustible y cayó en el mar antes de llegar a su punto de reabastecimiento en la isla de Howland en el Pacífico. Por otro lado, hay quienes señalan que que ella hizo un aterrizaje de emergencia en una pequeña isla donde fue capturado por el ejército japonés.